miércoles, noviembre 29, 2006
De restas...y más

Haces días intento restarte de mis siempres,
y pretendo ir contra el constante resultado,
Insistente
Jamás.
Tardes sin opciones,
Limitada a escribir sobre cosas
Que no entiendo,
Mientras me pierdo
En un azul momento.
Apago la luz, cierro los ojos
Y se me hace perpetua
Tu imagen,
Y ahora mismo estás a mi lado
Con los ojos cerrados,
Soñando conmigo.
Busco razones para esfumar
El delirio de tu voz,
De tu verso,
De este encuentro
Descubro en otros, a más otros
Semejantes entre sí,
Nunca iguales a ti,
Bebo sus esencias y me saben
Amargas,
Dame tu dulce sabor,
---------------------------------------------
Más que tus manos, boca, piernas y cabellos
Busco tus ojos,
Los nombró: avellanas
En otras bocas te he buscado,
Posibles hallazgos
Existes cuando no te recuerdo,
Vienes, vas
Como una inconstante ola,
Marea de mis días
Querido, nunca creas en mis arrebatos
De niña que se aleja,
Cada que te mienta,
Será por un siempre y falso abandono mío.
Me encandila, la idea
De ver tu cara de espanto
Ante mi posible
Inexistencia.
y pretendo ir contra el constante resultado,
Insistente
Jamás.
Tardes sin opciones,
Limitada a escribir sobre cosas
Que no entiendo,
Mientras me pierdo
En un azul momento.
Apago la luz, cierro los ojos
Y se me hace perpetua
Tu imagen,
Y ahora mismo estás a mi lado
Con los ojos cerrados,
Soñando conmigo.
Busco razones para esfumar
El delirio de tu voz,
De tu verso,
De este encuentro
Descubro en otros, a más otros
Semejantes entre sí,
Nunca iguales a ti,
Bebo sus esencias y me saben
Amargas,
Dame tu dulce sabor,
---------------------------------------------
Más que tus manos, boca, piernas y cabellos
Busco tus ojos,
Los nombró: avellanas
En otras bocas te he buscado,
Posibles hallazgos
Existes cuando no te recuerdo,
Vienes, vas
Como una inconstante ola,
Marea de mis días
Querido, nunca creas en mis arrebatos
De niña que se aleja,
Cada que te mienta,
Será por un siempre y falso abandono mío.
Me encandila, la idea
De ver tu cara de espanto
Ante mi posible
Inexistencia.
Etiquetas: Poemas de Octavia